La creencia popular que extendieron los filósofos y físicos, tanto griegos como romanos, era la de que el cuerpo humano estaba formado por cuatro sustancias genéricas denominadas humores (líquidos) y que la salud estaba determinada por el equilibrio de dichos humores: bilis negra, bilis, flema y sangre. De esta forma podían dar una explicación razonable a las dolencias e indisposiciones, así como a las discapacidades, tratándolas como un exceso o déficit de alguno de estos elementos.
Más información en:
Pseudociencia. La teoría de los cuatro humores.
Un saludo.
Akasha Valentine Escritora y Poeta.
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